Durante décadas, México ha sido definido como un país de tránsito, destino y retorno de migración debido a la intensa movilización de personas dentro y fuera del país, derivado de la proximidad con Estados Unidos. La Región Noroeste cuenta con una de las fronteras más dinámicas del país, la frontera entre Tijuana, México y San Diego, California, que es considerada como una de las más transitadas del mundo con más de 48 mil cruces peatonales diarios.

Conforme a datos del Censo de Población y Vivienda 2020, en el estado de Baja California se encuentran alrededor de 269,985 personas migrantes, equivalente a que 8 de cada 10 personas de la entidad provienen de otro lugar de origen.

En el marco del Día Internacional del Migrante, que se conmemora cada año el 18 de diciembre, la organización de ayuda humanitaria World Vision México pide mitigar la realidad que viven las familias en movilidad, ya que a raíz de las deportaciones masivas que se han dado recientemente, más de 30 mil niñas, niños y adolescentes se han visto afectados en estos denominados “eventos de devolución”. Tan solo entre los albergues colocados por el gobierno de Baja California, en Tijuana y Mexicali, se ha identificado que el 5.1% de su población son niñas y niños no acompañados, mientras que el 0.4% sí cuentan con algún tutor.

Como parte de su plan de acción en favor de la niñez y adolescencia de nuestro país, World Vision México, colabora de la mano de las autoridades para garantizar los derechos de las personas en situación de movilidad, especialmente para las niñas, niños y adolescentes, por lo que trabaja manera conjunta con donantes, empresas y agencias internacionales.

Con ayuda de sus aliados, entregan paquetes de alimentos básicos, artículos de higiene y limpieza, insumos de higiene menstrual y kits de higiene personal y familiar. Además, impulsan la construcción y mejora de espacios de infraestructura en los albergues, como es la colocación de plantas purificadoras de agua, acondicionamiento de baños para mujeres y hombres, estaciones de lavado de manos, lavaderos comunitarios y filtros de purificación de agua.

Estas acciones permiten que las personas en movilidad accedan a agua limpia y purificada, así como a instalaciones sanitarias dignas que promueven una mejor higiene y hábitos saludables tanto para la niñez como para las personas adultas. Gracias a este trabajo, a lo largo de estos años hemos logrado beneficiar a más de 15,000 personas en situación de movilidad”, explica Noé Martínez, Director Regional de zona Noreste de World Vision México.